“Somos ángeles y demonios al mismo tiempo. No somos una sola persona, sino una contradicción, una complejidad de fuerzas dentro de nosotros,..” Obra Satanás de Mario Mendoza, pág. 136. Lo importante es aprender y controlar los demonios internos que se manifiestan con el miedo, la ira, la depresión, la tristeza, el vacio y la soledad, lo cual produce el surgimiento de los demonios anteriormente mencionados.
“En realidad es en la intención en lo que consiste el mal, y a menudo se juzga con demasiado rigor, lo que es más que una debilidad, mientras que otras veces la misma debilidad es disculpada.” Ovidio Rebaudi. Es decir, todo depende de la sociedad y la cultura de esa misma sociedad en la que se desenvuelva.
Mario Mendoza en la obra Satanás dice: “No existe el bien y el mal separados, cada uno por su lado, sino unidos, pegados. Y a veces se confunden.” Pág. 137. Un acto que aparentemente es malo deja una enseñanza o moraleja positiva para la vida, es decir, que muchas veces algo malo que hacen las personas trae como consecuencia el bien, él cual dejará buenas lecciones para la vida.
Los conceptos sobre el bien y el mal adquieren sentido gracias al relativismo moral, donde las normas y reglamentos impuestos influyen mucho, aunque ayudan a mantener el orden de una sociedad. Una cosa es buena cuando nos conviene y se concibe con bien, y es mala cuando no nos conviene y se conoce como el mal. El bien y el mal se consideran que sirven para disculpar y condenar, pero nunca para comprender. El bien y el mal es cuestión de intereses ambiciosos y deseos de la mente por lograr lo que se busca.